Bolivia proyecta invertir al menos 344 millones de dólares para fortalecer la integración eléctrica regional con Brasil, Chile, Perú y Paraguay, con el objetivo de beneficiar a las poblaciones fronterizas y mejorar el suministro energético en la región. La estrategia incluye la exportación de excedentes de energía eléctrica para consolidar la integración energética en Sudamérica.
La Empresa Nacional de Electricidad (ENDE Corporación) lidera las negociaciones con compañías eléctricas de los países vecinos. Actualmente, Bolivia tiene una capacidad de generación de energía eléctrica de 3.600 megavatios (MW), de los cuales 1.650 MW se destinan al mercado nacional.
ENDE está desarrollando varios proyectos clave, como la Interconexión Eléctrica del Norte Amazónico de Bolivia al Brasil desde Pando, y la Interconexión Eléctrica entre Bolivia y Brasil desde Puerto Suárez en Santa Cruz. Estos proyectos se dividen en fases y se espera una inversión inicial de 125,3 millones de dólares con resultados previstos para 2025.
En el caso de la interconexión con Paraguay, ENDE y la Administradora Nacional de Electricidad (ANDE) concluyeron un estudio para conectar las subestaciones Yaguacua en Bolivia y Loma Plata en Paraguay, con una inversión proyectada de aproximadamente 219 millones de dólares.
Con Perú, se ha avanzado en un contrato para suministrar energía a poblaciones como Cocos Lanza y San Fermín en el departamento de La Paz, con una inversión inicial de 111.000 dólares financiados por el Programa de Electrificación Rural II (Per II). Se espera la autorización del Ministerio de Energías y Minas de Perú para iniciar la interconexión eléctrica.
Además, se están llevando a cabo negociaciones y estudios para la interconexión eléctrica con Chile, donde se han identificado tres alternativas y se prevé iniciar la segunda fase en 2023, con la ejecución de proyectos proyectada para beneficiar a las regiones del norte chileno y el occidente boliviano.
Finalmente, Bolivia ya cuenta con una interconexión operativa con Argentina desde marzo de 2023, que une la Subestación Yaguacua con la Subestación Tartagal, beneficiando a localidades como Tartagal, Orán, Piquirenda, Tabacal, Pichanal, Senda Hachada y Dragones en el norte argentino, generando ingresos significativos por exportación de energía eléctrica.