En una jornada marcada por la tensión social, organizaciones sociales argentinas llevaron a cabo ayer numerosas protestas en todo el país en rechazo a las políticas de ajuste implementadas por el gobierno de Javier Milei.
Los enfrentamientos con la Policía dejaron al menos tres personas heridas, mientras que las fuerzas de seguridad utilizaron gas lacrimógeno y camiones con cañones de agua para dispersar a los manifestantes.
El denominado “piquetazo nacional” incluyó la realización de 500 cortes de rutas y marchas en diversas localidades, así como el cierre de los accesos viales a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Las movilizaciones tuvieron como objetivo principal manifestar el descontento ante los ajustes económicos y sociales impulsados por el Presidente, así como denunciar el drástico recorte de los padrones de beneficiarios de planes sociales.
Entre las demandas de los manifestantes se destacó la exigencia al Gobierno para que reanude el envío de alimentos a los comedores populares, en un contexto de creciente preocupación por el aumento de la pobreza y la desigualdad en el país.
El clima de tensión se mantuvo durante toda la jornada, con incidentes reportados en varios puntos del país. Las autoridades policiales han anunciado la apertura de investigaciones para esclarecer los hechos ocurridos durante las protestas.