El presidente Luis Arce ha dejado claro que se hará una “defensa inclaudicable” ante esta propuesta que busca revertir los avances logrados en la construcción de un país más justo y equitativo.

El expresidente Sánchez de Lozada, quien se encuentra prófugo de la justicia boliviana desde 2003, reapareció recientemente planteando la reforma de la Constitución Política del Estado y la creación de la figura de un primer ministro. Esta propuesta pretende retroceder en el tiempo, eliminando los avances en la plurinacionalidad, la redistribución de la riqueza y la participación ciudadana.

Sánchez de Lozada es identificado como uno de los representantes del neoliberalismo en Bolivia, un modelo que privilegió a unos pocos en detrimento del bienestar de la mayoría de la población. Durante su gobierno, se privatizaron y capitalizaron empresas estatales, políticas que fueron revertidas con el retorno del Movimiento al Socialismo (MAS) al poder.

El presidente Arce ha enfatizado que el Estado Plurinacional de Bolivia, establecido en 2009 mediante la Constitución Política del Estado redactada por la Asamblea Constituyente, será defendido de manera incansable. Este modelo de Estado garantiza los derechos de las diferentes naciones, promueve la democracia intercultural, el desarrollo económico con justicia social y el “Vivir Bien” de todos los pueblos bolivianos. Es un esfuerzo colectivo para construir una Patria descolonizada, despatriarcalizada y libre de exclusión, racismo, discriminación, explotación y dominación.

Es importante recordar que Sánchez de Lozada es uno de los principales acusados por la masacre de octubre de 2003, un hecho que aún está presente en la memoria de millones de bolivianos y bolivianas. En Estados Unidos, se lleva a cabo un juicio civil en su contra por estos hechos.

Además, es necesario tener en cuenta el contexto internacional en el que se presenta esta propuesta. El documento de Sánchez de Lozada es auspiciado por el Kozolchyk National Law Center, un think tank asociado al Departamento de Estado de Estados Unidos y aliado de gobiernos de orientación neoliberal y conservadora. Esto plantea interrogantes sobre los intereses geopolíticos y estratégicos que podrían estar detrás de esta propuesta, relacionados con el reposicionamiento de Estados Unidos en la región.

La propuesta de Goni promueve un sistema político parlamentario que ha facilitado la presencia y el control estadounidense en países como Perú, donde se han incrementado las bases militares y las tropas desplegadas. Además, busca eliminar la prohibición de bases militares extranjeras en Bolivia, autorizar la cooperación militar transnacional, institucionalizar la privatización y anular las autonomías y la democracia intercultural.

Es fundamental que como pueblo boliviano estemos atentos y rechacemos cualquier intento de imponer un sistema político que socave nuestra soberanía y los logros alcanzados en la construcción de un país más inclusivo y justo. La propuesta de Sánchez de Lozada representa una amenaza para la autodeterminación de Bolivia y busca reinstaurar un modelo neoliberal que privilegia a unos pocos en detrimento del bienestar de la mayoría.

El Gobierno de Bolivia, encabezado por el presidente Luis Arce, continuará trabajando en la consolidación y fortalecimiento del Estado Plurinacional, garantizando los derechos de las diferentes naciones y promoviendo un modelo económico social comunitario y productivo. Se buscará siempre el crecimiento con justicia social, la redistribución de la riqueza y la erradicación de las desigualdades que han afectado históricamente a nuestro país.

Es imperativo destacar que la propuesta de Sánchez de Lozada es respaldada por el Kozolchyk National Law Center, un think tank asociado al Departamento de Estado de Estados Unidos, lo que evidencia intereses geopolíticos y estratégicos detrás de su planteamiento. Bolivia no puede permitir que su soberanía sea nuevamente vulnerada por intereses externos que buscan imponer un modelo que favorece a las potencias extranjeras en detrimento de nuestro propio desarrollo y bienestar.

El Gobierno boliviano hace un llamado a la unidad del pueblo y a la defensa de los logros alcanzados en la última década, bajo el liderazgo del Movimiento al Socialismo. No olvidemos la masacre de octubre de 2003, que dejó un doloroso saldo de más de 60 bolivianos asesinados y que aún está presente en la memoria colectiva. No permitamos que aquellos responsables de aquellos trágicos sucesos vuelvan para intentar revertir el avance hacia una sociedad más justa y equitativa.

En conclusión, el Gobierno de Bolivia rechaza contundentemente la propuesta regresiva del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada y ratifica su compromiso con la defensa del Estado Plurinacional y la construcción de una sociedad en la que todos los bolivianos y bolivianas tengan igualdad de oportunidades y derechos. El camino hacia un futuro próspero y justo para nuestra nación se encuentra en la consolidación de un Estado que garantice la participación ciudadana, la inclusión de todas las culturas y la redistribución equitativa de la riqueza.

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *