Este miércoles se dio inicio oficial al cónclave en el Vaticano, con la participación de los 133 cardenales electores habilitados para elegir al próximo Sumo Pontífice de la Iglesia Católica.
La ceremonia comenzó con una procesión solemne desde la Capilla Paulina hasta la Capilla Sixtina, durante la cual los purpurados entonaron las Letanías a los Santos. Una vez reunido el Colegio Cardenalicio en su totalidad, el exsecretario de Estado, cardenal Pietro Parolin, pronunció las palabras iniciales del ritual, conforme al protocolo establecido.
Posteriormente, cada cardenal realizó el juramento solemne de forma individual, colocando su mano sobre los Evangelios y repitiendo la fórmula estipulada en la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis.
Finalizado el juramento, se pronunció el tradicional “Extra Omnes”, marcando la salida de toda persona ajena al proceso y el cierre de las puertas de la Capilla Sixtina, dando así inicio a la primera votación del cónclave.
De no alcanzarse la mayoría de dos tercios requerida para la elección del nuevo Papa, se anunciará mediante humo negro desde la chimenea del Vaticano, como lo establece la tradición.
El elegido será el 267º sucesor de San Pedro y líder espiritual de más de mil millones de católicos en el mundo.