Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) está realizando un levantamiento sísmico en el área de Vitiacua, ubicada en el departamento de Chuquisaca. El sondeo forma parte del Plan de Reactivación Upstream de YPFB, que apunta a ampliar las oportunidades exploratorias en Bolivia.
El estudio sísmico cubrirá un área de 166,26 kilómetros cuadrados. Utilizará tecnología sísmica 2D, que consiste en emitir ondas sonoras a través de generadores de energía que viajan a través de las capas de roca y son registradas por unos sensores en la superficie llamados geófonos.
Los datos recopilados del estudio sísmico serán procesados e interpretados para identificar posibles depósitos de hidrocarburos. Si se encuentran depósitos prometedores, YPFB perforará pozos exploratorios para evaluar su viabilidad comercial.
El área de Vitiacua está ubicada en la región Subandino Sur de Bolivia. Esta región es conocida por su potencial para la producción de petróleo y gas. YPFB cree que el área de Vitiacua tiene potencial para contener hasta 2 billones de pies cúbicos de gas.
Se espera que el estudio sísmico esté terminado en dos meses. Si los resultados son positivos, YPFB podría comenzar a perforar pozos exploratorios en el área de Vitiacua a fines de 2024.
El levantamiento sísmico es un emprendimiento importante para YPFB. Es el estudio sísmico más grande que la compañía ha realizado en los últimos años. Se espera que la encuesta cueste aproximadamente $100 millones y cree más de 200 puestos de trabajo en el área.
YPFB se compromete a realizar sus operaciones de manera segura y ambientalmente responsable. El estudio sísmico se realizará bajo estrictas normas ambientales. YPFB también trabajará con las comunidades locales para garantizar que se beneficien del proyecto.
El levantamiento sísmico de Vitiacua es un hito importante para YPFB. Es el primer paso en los esfuerzos de la empresa por expandir sus actividades de exploración y producción en Bolivia. Si la encuesta tiene éxito, podría conducir al descubrimiento de nuevas reservas de petróleo y gas, lo que impulsaría el sector energético de Bolivia.